Buscar este blog

viernes, 2 de enero de 2015

UN MONTÓN DE POSIBILIDADES PARA EL NUEVO AÑO




Cada año nuevo que empieza nos hacemos buenos propósitos, que a veces, o para ser más honrados, casi nunca coseguimos llevar a cabo. 
 Este año vamos a preguntarnos ¿Y por qué? ¿Qué ocurre que se nos olvidan tan pronto los buenos propósitos? ¿Quizás nos falta voluntad? ¿Seriedad?. Ahondemos un poco a ver que encontramos en nuestro interior, para que esos buenos propósitos se vayan tan pronto por el desague de nuestra conciencia.

Acaso, solo sea dejadez. Nos dejamos llevar por el flujo de la ida, de nuestra cotidianidad. El trabajo, la familia, los quehaceres diarios, y casi sin darnos cuentavolvemos a nuestra rutina, dejándonos arrastar por los mismos problemas, las mismas situaciones e impidiendo asñi que nada nuevo ocurra.

Y ya sabemos.....si queremos que algo diferente pase...no podemos seguir haciendo lo mismo.



Así que para empezar, nuestro propósito este año va a ser....cambiar. Cambiar algo, aunque sea pequeño, pero algo. Esa cosilla que no nos gusta de nosotros mismos. Ese algo que arrastramos pero que no nos hace estar muy orgullosos que digamos. Puede ser...el cigarrillo de más. (todos son de más). Los kilitos de más. Las rencillas con nuestra vecina, o con nuestra cuñada. En nuestro interior sabemos que es eso que más nos molesta de nosotros mismos. pero eso sí, elijamos una sóla cosa.

Tenemos que centrarnos totalmente si esta vez queremos alcanzar el éxito. Elijamos lo que elijamos, hemos de poner toda la carne en el asador.

Vamos a hacernos nuestro planing. Vamos a organizarnos perfectamente. Y no vale aquello de... por un día...no va a pasar nada ¡No!

Un día sí que importa. Un día es un todo. 

Imaginemos que nuestra meta es adelgazar. Pues vamos a empezar ¡ya! En este momento. No valen excusas. Y cuando alguien nos incite a comer algo que no debemos, con toda nuestra fuerza y convicción le contestaremos, ¡No! es mi propósito y lo voy a conseguir, si tu no quieres conseguir el tuyo es tu problema.

Así llenos de convicción y alegría nos daremos tres meses. Dentro de tres meses, revisaremos los resultados. Y a ver si este año podemos decir, pues sí, ¡lo he conseguido! ¡este año sí!
Os aseguro que la alegría y la recompensa serán inmensas.

Más que por los kilos perdidos, por la satisfacción de haber conseguido el propósito.

A mi me ocurrió cuando dejé de fumar, hace ya de esto muchos años. Me costó lo mío,pero la satisfacción que sentí y que siento cada día por haber sido capaz de dejarlo no tiene igual.

Os animo a todos, y os animo mucho, porque la alegría de la vida está en estas pequeñas cosas, en estos pequeños retos que alcanzamos. 

Me encantaría que me hiciérais partícipe de vuestros propósitos y de vuestros logros. Sería muy feliz si los consiguiérais.

Así que ¡ADELANTE!

Feliz 2015 y recuerda que solamente tú puedes hacer que este año sea ¡El mejor!
Saludos desde optimisstica.