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jueves, 29 de noviembre de 2012

¡¡¡Que no puedan con nuestro optimismo!!!


El ánimo alto en todo momento (hasta en los peores).


Que no vivimos buenos momentos en España, no es ninguna novedad. Quizás por eso, es cuando menos podemos bajar la guardia. Quizás por eso, debemos sonreir siempre, esperar tiempos mejores y luchar. Porque no vale lo de esperar sentados, no. Hay que hacer algo. Y podemos empezar por contagiar alegria a los que nos rodean. Todos conocemos a alguien que lo está pasando mal y no vale hacer la del avestruz amigos, no. Hay que ayudar, ayudar como se pueda. Si tenemos medios pues con ellos y si no los tenemos con compañía, sonrisas y buena voluntad. 

Imaginemos por un momento que somos nosotros los que lo estamos pasando mal ¿Qué creéis que nos ayudaría más? ¿Alguien que viene y nos repite por enésima vez lo mal que estamos, lo mal que lo hace el gobierno de turno? etc. etc. ¿ O alguien que nos anima, o incluso que nos ayuda a buscar un trabajo. Alguien que nos dá ideas, y porqué no, alguien que nos echa una mano de verdad.

Es tiempo de solidaridad. Es tiempo de demostrar que no nos rendimos. Que ni bancos, ni gobiernos, ni ricachones van a poder con nosotros. Que hemos pasado peores tiempos, o por lo menos los han pasado nuestros padres, y que aquí estamos. Que el mundo no se acaba por una crisis económica. Pero sí se puede acabar por falta de solidaridad. Por falta de amor, por mirar hacia otro lado.



 Recordemos siempre que nosotros, los de abajo, somos más. Eso que no se nos olvide, que con unión se consiguen hasta los imposibles. Es fácil caer en la desesperación, pero no para nosotros, eso nunca. Así que frente arriba, cojamos aire, sonrisa de oreja a oreja y a la lucha. 
Y¿Queréis que os diga mi opinión con respecto a las noticias? No las leáis, no veáis los telediarios. No vale la pena. Nos enteramos al final de todo igual, pero por lo menos nos evitamos algunos malos ratos. ¿O me va a decir alguien que disfruta un solo momento viendo un telediario? Hay que negarse a hacer todo aquello que es malo para nuestra salud y las noticias en este momento lo son. Que se las coman ellos. Esos que hay y que no nos gusta señalar y que son los que nos han traído aquí. Ahora que sean ellos los que peguen  y paguen los platos rotos. 
Nosotros a lo nuestro, a hacer felices a los que nos rodean, a luchar con dignidad por mejorar nuestras vidas y a ayudar en lo que podamos.
Para terminar os voy a poner algunas frases de personajes famosos que vienen al pelo.

Haz lo que puedas con lo que tengas, estés donde estés. Theodore Roosevelt.

Lo imposible es el fantasma de los tímidos y el refugio de los cobardes. Napoleón I

El destino es el que baraja las cartas, pero nosotros somos los que jugamos. W. Shakespeare.

Y no olvidéis nunca que una sonrisa o una palabra amable pueden hacer milagros. Saludos desde OPTIMISSTICA. 
 








 







miércoles, 21 de noviembre de 2012

Dahab; una maravilla egipcia a descubrir



No sólo de pirámides vive Egipto.




En el golfo de Áqaba, en la  península del Sinaí, se encuentra  Dahab. Un pueblito de  Beduinos de unos 10.000 habitantes y que embelesa por distintos motivos a los que llegamos del mundo occidental.
Mucha gente conoce Egipto. Son muchos los que han viajado a Luxor, El Cairo, Alejandría e incluso a Sharm El Sheikh. Pero ya no son tantos (a excepción de buceadores trotamundos) los que conocen esta pequeña perla situada entre continentes. Dahab se encuentra en el sureste de la península, mirando hacia las costas de Arabia.
El Sinaí a su vez, está situado entre Africa y Asia en el Próximo Oriente y entre dos golfos, el de Suez y el de Aqaba. Limítrofe con la Franja de Gaza y con Israel, la península del Sinaí, además de ser una joya histórica, con su monte Sinaí, donde según el Antiguo Testamento Moisés recibió las Tablas de la Ley con los Diez Mandamientos, nos ofrece paisajes sin igual de playas, desierto y montañas espectaculares.
Después de llevar más de 20 días en El Cairo, en el ruidoso, amado, estresante, bello, y siempre añorado Cairo, decido ir por unos días a Dahab para relajarme, descansar y ver una cara muy diferente de mi querido Egipto. Allí todo es paz, silencio, sol y descanso.
Por unos 100 euros compré los billetes de avión, ida y vuelta hasta Sharm El Sheik. Desde allí tuve que viajar por el desierto en taxi, unos 60 kilómetros hasta Dahab. El viaje como podéis imaginar es un poco incómodo, pero cuando estás allí todo lo ves con unos ojos muy distintos. Las comodidades occidentales se dejan a un lado y empezamos a valorar otros aspectos de nuestras vidas, a veces muy olvidados en nuestro país. Creo que nos contagiamos de su espíritu de solidaridad, de su capacidad de adaptación al medio. Puedes percibir en ellos siempre una sonrisa hasta en las situaciones más incómodas. He visto muchas veces como la gente se vuelca en ayudar a cualquiera que se le pare el coche en medio de un tráfico infernal y con una temperatura de más de 40 grados. (Es algo habitual ya que hay coches funcionando con más de 45 años).  Cuando vas por la calle,  casi sin aliento para poder caminar por culpa de las altas temperaturas, y ves como la gente empieza a empujar un coche de alguien que no conoce y que tiene que sudar a mares  para conseguir ponerlo en marcha, te das cuenta de que conservan algo que nosotros hemos perdido. Así que allí todo, todo, se disfruta mucho más.
En Dahab viven muchos extranjeros, entre ellos algunos españoles que han sabido encontrar un verdadero remanso de paz en este rincón del mundo.
También es destino de muchos buceadores que anhelan surcar sus aguas cristalinas entre corales. Es muy famoso el Blue Hole (agujero azul) Lugar precioso donde los haya, pero que también ha costado la vida a algunos aventureros extremos.
 Por supuesto  pude saborear la suculenta comida egipcia y un maravilloso pescado, que las mismas personas que lo servían, se habían encargado de hacerlo caer en sus redes sólo unas pocas horas antes, o a veces minutos.
Pero lo que más me divirtió y de lo que pude disfrutar horas y horas fue de la playa. Un mar tranquilo, transparente y lleno de pececillos que se arremolinaban en torno a mí a mordisquear mis pies. Las costumbres de los beduinos hacen que los adultos, sobretodo las mujeres, no se bañen en el mar cuando hay gente extraña. Sólo los niños lo hacen, con lo que la playa dista mucho de ser una playa como las que conocemos aquí. Allí la tranquilidad lo empapa todo y eres capaz de pasarte cuatro horas en el agua sin apenas darte cuenta de que ha pasado el tiempo. 


En esta otra foto podéis ver como los niños utilizan a un camello de trampolín. Era un camello que nos visitaba todas las tardes más o menos a la misma hora. Llegaba  solo, se metía en el agua y los niños se lo pasaban de lo lindo jugando con él. También era normal ver aparecer a las cabras mientras tomaba el sol.
El tiempo allí transcurre con otra velocidad. A veces hay que  parar y comparar.
Pasé unos días inolvidables en Dahab. Comí, reí y dormí como una niña…y me bañé cada día hasta arrugarme como una pasa, para una vez cargadas las pilas volver a El Cairo a seguir con mis clases y con mis veranos egipcios. En esta ocasión también, con las conocidas manifestaciones de la plaza Tahrir.

jueves, 15 de noviembre de 2012

Cómo elegir en cada momento nuestro estado de ánimo

 Está demostrado que con un poco de perseverencia, podremos evitar las sensaciones que no nos gustan, como el miedo, la tristeza o incluso el mal humor.

 Ha llegado por casualidad a mi un libro de autoayuda llamado Los diez secretos de la abundante felicidad. Si....si, ya sé...me vais a decir que como éste hay miles, que te hablan de lo bueno de ver la vida color de rosa y de lo maravilloso de encararla con positividad. Es cierto, yo no voy a repetirme y no es mi intención daros la vara, pero sí que voy a intentar entresacar pequeños retazos que me han llamado la atención y que puedan hacerlo en un futuro. Pequeños retazos que me han encantado y que creo que podemos adaptar a nuestra vida cotidiana.
Por eso hoy os hablaré de los "anclajes".
Para que vayamos entendiendo de qué se trata os diré que la publicidad los utiliza constantemente y lo mismo podemos hacer nosotros, pero para nuestro propio beneficio, no para el de ellos.
El autor en un momento del libro, cuenta la historia del perro de Pavlov. Cada vez que Pavlov daba de comer a su perro, tocaba una campana. El perro asoció el sonido de la campana con la comida y al poco tiempo el simple hecho de oir la campana era suficiente para hacerlo relamerse. Lo que el perro de Pavlov hizo fue asociar o anclar el sonido de la campana con la comida. Y lo mismo ocurre con los seres humanos. Hagamos una pequeña prueba...¿Cómo nos sentimos cuando oímos el taladro del dentista?  ¿Cuándo olemos un bebé?  ¿Cuándo escuchamos una canción de nuestra juventud?
Es decir hay anclajes que nos llevan directamente a sentimientos de infelicidad y otros, todo lo contrario, a sentimientos de distinta índolo que pueden ser de felicidad absoluta, de seguridad, de confianza, o de cualquier otro sentimiento que se nos ocurra y que necesitemos en algún momento poseer.
Según el autor con un poco de paciencia y auténtico propósito se pueden crear anclajes que nos harán la vida mucho más feliz. Vamos a ello.
Para empezar, deberemos de pensar en algún momento de nuestra vida en el que hayamos sentido esa emoción que queremos anclar para poder volver a ella cada vez que lo deseemos. Hay que pensar en esa escena todo lo claramente que podamos. Qué hacíamos, como respirábamos. Hay que tratarlo de captar todo y cuando hayamos conseguido recrear el momento al máximo haremos un gesto que siempre será el mismo. Por ejemplo, si yo quiero sentirme confiada y tranquila a la hora de hacer un examen, recordaré aquella vez que siendo una jovencita hize un examen brillante porque me encontraba exactamente así, segura y confiada en mis conocimientos y sin miedo alguno realicé un examen perfecto. Ahora, cuando quiera repetir aquella experiencia pensaré en ese momento y al mismo tiempo me frotaré las sienes por ejemplo, o los nudillos, el sitio es lo de menos, se trata de asociar cualquier movimiento a esa sensación. Si lo repetimos varias veces, conseguiremos volver a sentirnos como por arte de magia con las mejores sensaciones...y lo mejor es que acudirán a nosotros tantas veces como queramos.
Por lo que ya podemos practicar. Para sentirnos felices. Para afrontar un problema familiar. Para la lucha del día a día.
¡Vamos a intentarlo!  
Y no olvidéis nunca que una  sonrisa o una palabra amable pueden hacer milagros. Saludos desde OPTIMISSTICA.

lunes, 12 de noviembre de 2012

Reciclando, reciclando.

Un buen truco para reciclar y conseguir cerrar nuestras bolsas herméticamente.


Con este  artículo inicio un nuevo apartado al que le vamos a llamar  " Consejillos de la mami"

En él, incluiremos trucos de belleza caseros, ideas para reciclar y consejos de todo tipo que nos pueden venir muy requetebien para  estos tiempos que corren y que vamos a ser capaces de superar con alegría.

Vamos a ello:
Cuando abrimos una bolsa de cualquier tipo de alimento en casa y no usamos todo el contenido, suele ocurrir que la dejamos mal cerrada con el peligro de que se nos estropee. Para que ello no ocurra tenemos dos opciones: 
una; traspasar su contenido a un recipiente especial, el cual debemos llenar lo máximo posible porque si dejamos espacio libre, el alimento se deteriorará en un corto espacio de tiempo.  Y dos; utilizar el siguiente truco:

Como veis solamente necesitaremos la bolsa que queramos cerrar y la parte de arriba de una botella de plástico con su correspondiente tapón.



Pasamos la bolsa por el cuello de la botella.

  
Sacamos bien el plástico y cerramos.

El producto en cuestión se quedará perfectamente cerrado y hermético y lo habremos conseguido con cero gasto o en todo caso con muy poco, ya que si la bolsa original del producto es muy gruesa deberemos de cambiarla por una de plástico suave y obviamente que sea adecuado para productos alimenticios.

Por supuesto esto es válido para cualquier producto....ya sea de limpieza, cosmético, o alimentario.

Así de sencillos serán nuestros consejos. Espero que os sea útil.

Un abrazo y no olvidéis nunca que una  sonrisa o una palabra amable pueden hacer milagros. Saludos desde OPTIMISSTICA  




domingo, 11 de noviembre de 2012

Agradecer...agradecer...agradecer siempre



 Estrellas : una ilustración de un fondo de la independencia de las partes el día con estrellas globos y cintas de color rojo, blanco y azul Foto de archivo
¿Sabes que dar las gracias es una de las cosas que mejores sensaciones nos produce?
Si no has reparado en ello, haz la prueba. Mira a tu alrededor, piensa y seguro que no tardas mucho tiempo en encontrar un montón de cosas por las que dar las gracias. No te importe que pueda parecer cursi. Tu a lo tuyo, que no es otra cosa que encontrarte bien contigo mismo y de paso dar alegría a los que te rodean. A propósito de esto...el gran Mario Moreno "Cantinflas" decía que el único motivo por el que valía la pena luchar en la vida era por hacer felices a los que te rodean. Que gran persona tuvo que ser para destilar un pensamiento tan hermoso.
Pero ahora a lo que vamos. Dar las gracias por los bienes de los que disfrutamos. Ya sabemos que me vas a decir que los tiempos estan chungos, que hay mucho por lo que llorar...pero te aseguro que el llanto no te va a aportar nada positivo....pero el agradecimiento sí.

Estrellas : confeti de colores de estrellas en blanco

 Hoy os traigo este pensamiento porque me toca revisión en el oftalmólogo...jejejeje (¿nada que ver no?) bueno, pues hoy reflexionaba...he de ir a revisión porque hace un año me operaron de la vista. Fué un regalo de mis hijos, si no, no lo hubiese hecho...pero la verdad que en que bendita hora. Me operaron para mis defectos de lejos y me solucionaron los de lejos y los de cerca. El oftalmólogo se hace cruces conmigo...dice que nunca ha visto un caso igual. Y es que después de más de 20 años llevando gafas, hace un año que me he visto totalmente liberada y veo perfectamente, tanto de lejos como de cerca, yo misma a veces no me lo creo...pero os juro que es cierto. Todo aquel que me conozca podrá dar fe de lo que digo. Así, que cuando estoy un poco mal, recuerdo esto y doy las gracias una y un millón de veces. Me hace sentirme muyyyyyyy feliz. Todo el que lleve gafas o las haya llevado sabrá de lo que le estoy hablando. Ahora ya hacen operaciones para la vista cansada o presbicia (cerca) pero es que yo no me operé de eso...solamente de lejos y el milagro o como quiera que se llame se produjo y veo perfectamente a todas las distancias. En fin, la cuestión es que me siento muyyyyyyy agradecida. Seguro que tu también tienes algo por lo que dar las gracias y sentirte bien. Hazlo y verás.
Estrellas : estrellas pintadas Foto de archivo


sábado, 10 de noviembre de 2012

Las noticias que nos gustan



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Estrellas de mar, marinero


 

 Inditex promueve un "revolucionario" sistema de seguridad marítima

 

El dispositivo de seguridad cuenta con la última tecnología en telecomunicaciones integrada en formatos simples y ergonómicos como un cinturón o un traje de agua, que no entorpece la tarea del marinero.

 Casals ha destacado que es válido para todo tipo de barcos, pesqueros o de recreo, aunque ha precisado que está especialmente pensado para las tripulaciones de pequeñas embarcaciones de pesca en las que se produce el 90 por ciento de las caídas por la borda por el tipo de tareas que realizan.

El sistema electrónico personal envía una señal de alarma en caso de caída al agua y despliega un chaleco homologado de inflado automático en dos segundos que mantiene a flote al marinero hasta su rescate. 

Casals ha señalado que el desarrollo del sistema ha costado unos tres millones de euros, de los que Inditex ha aportado una tercera parte.

Así, se ha calculado que el coste medio de la implantación del sistema en barcos de bajura con 1 o 2 tripulantes ascenderá a 3.300 euros, de los que la UE subvenciona el 61 por ciento, unos 2.000 euros.

De los 1.300 euros restantes, Inditex se hará cargo del 50 por ciento, y sobre la base de las 4.000 embarcaciones de este tipo que hay en España en desembolso rondaría los dos millones de euros.

                           






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 Estas son las noticias que nos gusta leer. Si las grandes empresas; bancos, multinacionales etc. Y si los políticos se ocuparan más de los problemas sencillos de la gente de a pie, de nuestros sufrimientos cotidianos, el mundo sería mucho más vivible.

Disfrutadla amigos. Y Gracias a Inditex.

 No olvidéis nunca que una sonrisa o una palabra amable pueden hacer milagros. Saludos desde OPTIMISSTICA.
  




jueves, 8 de noviembre de 2012

COMPARTIR PARA PROGRESAR


PODEMOS APRENDER A VIVIR DE UNA MANERA DIFERENTE Y ECOLÓGICA


A través de La Vanguardia nos llega una noticia procedente de Todmorden, una pequeña ciudad inglesa que ha conseguido cambiar la forma de ver la vida en sus habitantes.
Después de leer esta noticia he podido saber que en algunas ciudades españolas y cubanas, también se ha conseguido algo similar. Pero vamos con la noticia, que tiene mucho de cuento navideño y de esperanza en el ser humano.
Parece ser que todo empezó por una mujer de 62 años, economista y decidida, llamada Pam Warhurst.
Esta mujer pensó que cultivar verduras, hierbas aromáticas y árboles frutales, podría, además de alimentar a sus conciudadanos, unirles más en lo personal. No se lo pensó y se puso manos a la obra. Después de hablar con 60 de ellos y exponerles su idea, pidieron permiso para sembrar todos estos vegetales en todos los huecos posibles de su ciudad. Jardines, lugares abandonados, aceras y cualquier sitio libre fue rellenado con tierra de cultivo y la gente empezó a animarse a ayudar. Eso sí....había una condición; y es que cualquiera pudiera servirse libremente y gratis cuando lo deseara. Parece ser que al principio tenían miedo de que los vándalos pudieran hacer algún destrozo, pero no fue así. Todo el mundo cuida de todo. Unas trescientas personas dedican dos mañanas al mes a este trabajo, pero todos apoyan. Cada jardín o espacio cultivado debe de tener un cartel en el que dice "sirveté tu mismo". Se cultivó en espacios vacios frente a la comisaría de policía. También al ver el éxito obtenido,  los bomberos pidieron que se aprovecharan para este proyecto espacios en sus terrenos. Y así fue naciendo no sólo una forma ecológica de alimentarse si no una complicidad entre vecinos envidiable que llamó la atención del resto de ciudades del país. Hoy Todmorden se ha convertido en una ciudad turística que ha hecho progresar a sus ciudadanos. Se han abierto nuevos negocios para cubrir las necesidades de los visitantes. y ha conseguido que la gente comparta con su policia amistad y buena armonía además de mazorcas de maíz y cebollas.


miércoles, 7 de noviembre de 2012

Mi querido, querido Egipto.



¡Cuánto te echo de menos!. Tu sol, tu luminosidad, la amabilidad de tus gentes. Cuando recuerdo mis paseos por el Nilo, mis ojos, aún en la distancia se me llenan de su inmensidad y el corazón no sabe si cantar por la dicha de haberte conocido o llorar por la tristeza de la lejanía.
En fin...respiro y me positivizo para contaros algo que hoy me ha venido a la memoria y que siento la necesidad de rememorar.
Se trata de mi primer viaje a Egipto.
Fue en el verano de 2007. Una amiga me convenció para hacer un curso de árabe. Llevábamos un par de años estudiando árabe aquí en España y ella decía que lo mejor es estudiar in situ. Así que al final me convenció y allá que fuimos. Aunque los motivos son lo de menos. Lo mejor fue la serie de cosas fantásticas que me ocurrían cada día nada más poner los pies en la calle. Bueno, a veces ni siquiera hacía falta estar en la calle, en el mismo hotel la gente era fantástica y cada día había anécdotas para contar.
Yo entonces no hablaba casi nada de inglés y muy poco árabe, con lo que la comunicación no era fácil. Mi amiga era profesora de inglés y allí es el segundo idioma, con lo cual si tenía problemas ella siempre podía rescatarme. Pero no era el caso. Todo lo contrario, siempre, aunque con situaciones cómicas, podía arreglármelas por mí misma.
El primer día cuando bajamos después de desayunar, fuimos a recorrer un poco El Cairo. Recuerdo la primera vista dle Nilo, no podía apartar los ojos de él. También recuerdo unos preciosos árboles cuajados de flores que aquí no había visto nunca. Las calles plagadas de gente. El blullicioso Khan al Khalili. Pero sobretodo, sobretodo la amabilidad de las personas que nos encontrábamos por doquier.
Una de las anécdotas más bonitas que me ocurrieron en aquel viaje fue la segunda noche de mi estancia en el hotel. Un hotel pequeñito y familiar sin muchas pretensiones. Salí a buscar una cabina para llamar a mi familia ya que había comprado una tarjeta porque me habían dicho que salía bastante más barato que llamar desde el móvil o desde el hotel. El caso es que pregunté en la recepción del hotel por la cabina más cercana e inmediatamene un joven se prestó a acompañarme sin más objeción. Naturalemente yo no me fiaba mucho...pero viendo que la cabina se encontraba cerca me decidí a acompañarle donde me decía. La tarjeta me duró algo así como medio minuto y viendo la cara que se me había quedado el joven con su medio inglés, medio árabe trababa de explicarme que aquellas tarjetas no eran las más apropiadas. La situación no dejaba de ser cómica y para mí bastante decepcionante, ya que no había podido halar con los míos. Entonces sin más dilación el joven me dice que espere y desaparece. ¡Oh Dios! encima me quedo sola, de noche y sin saber donde me encontraba.....uffffffff, me arrepentí en un segundo de haberle hecho caso y de haber salido sola del hotel. Pero no me dió tiempo a asustarme demasiado porque en tres minutos de reloj volvió a aparecer con otra tarjeta en la mano que me ofrecía para que pudiese hablar sin problemas. Yo desconfiaba, pero viendo su insistencia acepté y utilicé la tarjeta. Esta vez pude hablar cuanto quise con mi familia sin ningún problema. Al terminar y viendo la cara de satisfacción de mi joven acompañante me dispuse a pagarle la tarjeta y por supuesto el tiempo que había invertido en mí. Pero...y aquí vino mi sorpresa se negó en redondo a cobrarme ni un solo centimo. Solamente repetía, ana sadiqui, ana sadiqui (yo soy tu amigo, en árabe) y amablemente me acompañó al hotel nuevamente, al mismo tiempo que con árduo trabajo me explicaba que él trabajaba en el hotel de camarero, que ya nos veríamos y que no tuviera ningún problema en pedirle cuánto necesitara. Ese es amigos el carácter egipcio. Lo he comprobado a través de los siguientes años en mis viajes. Otra anécdota preciosa que me ocurrió fue con un mendigo en las pirámides. Para no alargarme, solamente os resumiré que en un momento en el que yo me encontraba exausta por el asfixiante calor fuí a refugiarme a una sombra en la que se encontrba él. En ese mismo momento se disponía a comer un pan de pita que le había llevado otro mendigo igual que él y cuando me vió tan cansada, ni corto ni perezoso partió la mitad de su pan y me la ofreció convencido de que la iba a aceptar y a comerlo junto a él. Desafortunadamente lo que menos me apetecía a mi era comer, y me vi obliga a rechazarselo, algo de lo que todavía me estoy arrepintiendo. Sus manos estaban negras de andar todo el tiempo en la calle, pero os aseguro que con la amabilidad que me ofreció su pan, me hubiera sentado mejor que en el más rico de los manteles.
En fín otro día os cuento más. Las experiencias en mi Egipto se acumulan. Pero no se me olvidan.
Espero que disfrutéis de la vida...cada momento.

¡Sonríe por favor!

¡Sonríe por favor!

Al mal tiempo buena cara. Desde pequeños hemos oido esta máxima. Y es que nuestros antepasados eran muy sabios. Sabían que una sonrisa tiene más poder que el arma más sofisticada. Cuando te encuentres bien sonríe y cuando te encuentres mal sonríe también. Conseguirás engañar a tu cerebro que pensará que las cosas están bien y te mandará señales positivas en forma de endorfinas, las cuales te harán sentir mejor.
Hoy en día que solamente oimos quejas por todos lados, está bien que alguien tenga un discurso diferente y frente a tanta mala cara seamos capaces de ofrecer una sonrisa...si, si esa que tanta falta hace. No lo pienses más y ponla en tu vida...verás que puedes conseguir que el día cambie.
Ya sé que todo esto puede parecer muy ñoño..pero haz la prueba. Cuando las cosas no salgan todo lo bien que esperas...sonríe y si al cabo de unos minutos no te sientes mejor...escríbeme y me lo cuentas. Juntos analizaremos el asunto.
Porque contar las cosas, compartirlas, también es algo que funciona. Veremos los problemas con perspectiva y casi seguro ya no serán tan terribles como nos parecían.
Os ofrezco un abrazo y la mejor de mis sonrisas. Yo consigo ser un poquito más feliz cada vez que escribo aqui algo, espero que vosotros también lo seais al leerlo.

La mejor edad...la nuestra.

La mejor edad...la nuestra.

Tengo una amiga que desde que cumplió los treinta está sufriendo por la edad. Uffffff.....¡Qué martirio!!! Que si es una pena ser tan mayor...que si esto se nos pasa volando...¡Pero bueno!!! Disfruta el momento y olvídate del calendario. Yo creo que cada edad puede ser maravillosa si la aceptas y le sacas el máximo partido. Lo importante es sentirte bien contigo mismo y presumir de tus años. Porque a poco que reflexionemos, como le digo yo a mi amiga, deducimos lo siguiente: si a los treinta lloro por los 20 y a los 40 por los 30.....y así sucesivamente.....ufffffffff...qué cansancio. ¿Cuándo voy a vivir el aquí y ahora? Creo que mejor disfruto los que tenga en cada momento.
Doy gracias a Dios porque puedo hacer deporte que es algo que me encanta. Puedo pasear y disfrutar de la vida. Y sobretodo puedo escribir que es mi gran pasión. Doy gracias también por tener acceso a este medio que pone a mi alcance la posibilidad de contactar con personas maravillosas de todo el mundo. Así que...¿Qué más dá la edad que tengamos?... ¿A que me quieren lo mismo si tengo 20 como si tengo 50?  Eso sí, intento cuidarme para sentirme bien y para hacer felices a los que me rodean.
A propósito de la edad, me viene a la mente una de las novelas más preciosas que he leído. No es que sea un novelón importante, no. Es una novela pequeña, sencilla y que no mucha gente conoce, pero que a mí me dió una esperanza enorme en la vida. Se llama  " Las dos ancianas" su autora es  Velma Wallis. Y te cuenta como una persona por mayor que sea siempre puede aportar mucho a la sociedad en la que vive. Os aconsejo que la leáis. Es maravillosa


Hoy en día parece que vivimos una ola de estupidez en la que solamente cuenta la belleza física y la juventud. Olvidamos cuanto aporta la sabiduría y la experiencia. Los programas de televisión nos muestran miríadas de chicas y chicos jóvenes sin más valores que ése. Triunfan programas del tipo de Gran Hermano en el que se da culto a la imagen y solamente a la imagen.

Yo desde aquí reivindico el derecho a la felicidad y la plenitud en todas las edades de la vida. Hay algunas personas que cuando hablan de su juventud suelen decir " en mi época" y yo les replico ¿Cómo que en tu época? ¿ Es que acaso ésta no lo es? Yo mientras siga respirando, mientras siga viva y disfrutando de hacerlo, estaré en mi época. Otra cosa es cuando no lo disfrute....entonces Dios dirá.

Pequeños gestos que pueden cambiar el mundo.

Pequeños gestos que pueden cambiar el mundo.

Anteayer ví una hermosa película. En ella, un niño piensa que si él hace tres favores a tres personas distintas y esas personas a su vez hacen cada una otros tres favores a otras tantas personas, las buenas obras se multiplicarían tanto que el mundo no tendría más remedio que cambiar.Las personas serían mucho más felices, porque el número de buenas obras sería infinito.
¡Que pensamiento tan hermoso!
Estas cosas solamente se pueden poner en boca de un niño. Está claro que el autor, seguramente una persona adulta, no se atreve a poner estas ideas en la cabeza de otro adulto. Todos pensarían que es una utopía, que es algo así como imaginar un mundo feliz y sin problemas en el que  estaríamos cantando "tralarí, tralará".
Pero yo debo de ser muy infantil, porque  creo en los pequeños gestos. Creo que esas ideas y no las de los políticos o las de los grandes bancos, son las que podrían cambiar el mundo de verdad.
Claro que yo solamente soy una persona a la que le gusta escribir y que por cierto tiene un blog que no bate records de seguidores precisamente.  Pero a pesar de ello, aquí, ante mi pequeña audiencia, me atrevo a gritar que creo en la buena voluntad de la gente, que creo en los pensamientos infantiles porque son los que más verdad nos pueden aportar, y que  creo que si no existieran los soñadores el mundo haría mucho tiempo que habría dejado de existir.
Estoy cansada de las noticias sobre economía. Sobre la crisis. Sobre los políticos.
Quiero noticias sobre personas sencillas. Sobre las pequeñas alegrías de la gente. Sobre los sueños.
¿Acaso podríamos volar si no hubiera habido soñadores que dieron su vida en el intento? ¿Se habría abolido la esclavitud? ¿Podría votar la mujer?
La lista de personas soñadoras que nos han precedido afortunadamente es larga, por eso no nos podemos dar por vencidos. Sigamos pensando en un mundo mejor. Sigamos siendo niños. Seguramente tendrá mejores resultados que los de ser tan adultos.