Buscar este blog

jueves, 7 de junio de 2018

Vivir el momento actual.



Agradecida a la vida. 
No encuentro otro calificativo más adecuado. 
Agradecida por poder presenciar algo que siempre habría de haber sido totalmente natural. Si somos la mitad de mujeres en la humanidad ¿Por qué ha costado tanto llegar hasta aquí?
No pedimos ningún privilegio. No queremos quitar nada a nadie. Solamente equidad en el reparto. 

Hace ya muchos años, demasiados para algunas cosas, no tantos para otras. Cuando yo era una jovencita y soñaba con poder ser militar... y no pude. Con ser policía... y no pude. Y con muchas otras cosas, como piloto de aviación, deportista de élite etc. etc. ya se sabe, cuando somos niños o niña en este caso, crees que todo es posible, pero la realidad, y las leyes de entonces se encargaban de decirte lo contrario y de irte dando manotazos poco a poco para ponerte en tu lugar. 
He oído muchas, quizás demasiadas veces: ¡vete a fregar platos y a hacer camas y déjate de tonterías! Para casarte y criar a tus hijos no necesitas tanto.

A los que piensen que estoy exagerando, que en mi época la mujer ya podía hacer muchas cosas, le diré que no exagero en absoluto. Que solamente las familias muy pudientes se permitían dar algunos derechos a sus hijas, el resto nos aguantábamos mirando y envidiando una mujer que veíamos  en las revistas, en las novelas o en las pantallas de cine. Es cierto que también algunas de carne y hueso conseguían despuntar, pero como digo, eran las que entonces llamábamos niñas de papá, cosa que por supuesto yo no era, como tampoco la gran mayoría que me rodeaba. Así, pasaban los años y se fomentaba y robustecía la cultura patriarcal. Era lo normal. 
 


Quizá sea por eso, porque siempre he creído que nací antes de tiempo, por lo que habitualmente me rodeo de gente joven. Sigo estudiando a pesar de que siempre soy la mayor. Sigo jugando a padel y haciendo deporte, aunque me ocurre lo mismo. Normalmente casi doblo la edad de la gente que me rodea.

Esta vertiente de mi vida, es la que me ha hecho y  me hace ser peleona como diría mi hija. O inconformista como diría mi amiga Cristina. 

Lo que no me dejó hacer la vida en mis años jóvenes, lo hago ahora. Siempre es tiempo. Mientras viva será mi tiempo.




¡Estoy tan contenta de ver un gobierno plagado de mujeres!

Estoy tan feliz de ver a las mujeres peleando y diciendo ¡hasta aquí!

Gracias Pedro Sánchez por tener esta sensibilidad. No sé dónde llegará este gobierno. Pronosticar ahora algo sería muy aventurado. Pero de momento ¡Gracias!


Esto no quiere decir que no esté algo temerosa de lanzar las campanas al vuelo. Es muy posible que con el escaso número de parlamentarios con los que cuenta el partido del Sr. Sánchez no pueda moverse mucho. Pero, en este camino que habéis iniciado, el primer paso, me ha gustado ¡MUCHO!

Me he emocionado al ver a la ministra de Defensa pasando revista a las tropas en su posesión del cargo. Todos hemos recordado a la que fue la primera ministra de Defensa Carmen Chacón. Y también, he recordado la discusión que tuve con un joven que se reía a carcajada limpia rememorando la imagen de la Sra. Chacón pasando revista con una prominente tripa de embarazada. Yo, que la miraba llena de orgullo, no podía entender que este joven se burlara de aquella manera. Con su simpleza, venía a querer decir que una embarazada cómo iba a dirigir a las tropas, a lo que yo conteste indignada que no conocía a ningún ministro hombre o mujer que tuviera que pegar "barrigazos" con los soldados. Se trataba de ser, o en este caso de tener, la suficiente inteligencia para dirigirles adecuadamente, y para eso, no creía que la barriga importase mucho.

Como digo, nadie sabe lo que ocurrirá. Pero en este momento lo disfruto. Y lo disfruto mucho. Porque si yo no he podido hacer lo que soñaba, las mujeres jóvenes de hoy si que pueden. Ahora ya no le podrán decir a ninguna, por cuestión de sexo, que ella no puede.

¡¡¡Vamosssssssss!!!

Optimissticos saludos a todas las mujeres y a los hombres que nos apoyan.




No hay comentarios:

Publicar un comentario